Translate

mayo 24, 2017

Romance parar un arroyo



Llévame arroyito, por donde tú quieras,
que vas a los talas, que vas al pinar,
que peina en tus aguas largas cabelleras,
1os sauces llorones qué tristes están!

Llévame arroyito, por esa pendiente,
do danza la espuma, do gime el pinar,
do escucha la selva,mi nota silente,
tu queja y la mía se habrán de juntar.

Lévame arroyito por donde tú quieras,
mis hondos amoress tú habrás de guardar;
con aquel poeta que canta a mis ojos,
desde la planicie del cañaveral.

¿ Decidme arroyito, no me engañará...?
sus dulces quimeras que en versos recojo,
mis tiernos cantares le habrás de llevar:
Pero, Ah!, si temo que el dios de los Cielos

"Dos cosas iguales" ¡no quiera acercar!
El blanco rosario, la blanca azucena,
su lira, mi lira, y el blanco cantar.

Llévame arroyito, por donde tu quieras
que asciendes la cuesta, que bajas al mar;
que bañas el verde de toda esta tierra
que besa la otra do está mi cantar.

Ceñidme a tu cuita, mi noble arroyito,
que quiero contigo mi pena extenuar.
¡Viva la planicie del suelo argentino!
¡Viva la belleza del suelo oriental!


Milka L. Curbelo.

Desde mi soleada isla



En medio del mundo, apartada de todo,
en una isla lejana dorada por el sol,
me encontrarás cantando algún día lejano
triste desvencijado de pena el corazón.

Verás que desde el barro os alumbra una estrella,
que en medio del oasis apagará tu sed;
no sientas , peregrino, tú, tristeza por ella,
piensa que en ambas manos barro y luz puede haber.

Y dirán los qu elena mis humildes estrofas,
"vuestra luz es incierta, porque hay brumas en tí,"
pero yo que he logrado vencer a las tinieblas,
sonreiré estoicamente como la flor de lis.

Y desde mi soleada Isla de amor y ensueños
cantaré para todos cumpliendo con mi fin,
porque fui designada a sembrar por los Cielos,
y aún me quedan senderos albos y hondos que abrir.


Milka L. Curbelo.

Póstumas

(Al extinto escritor Serafín Domínguez Mancebo, mi sentido homenaje)





Lo conocí una noche de Paz y de Poesía,
envuelta entre las brumas lejanas del ayer...
¿ donde encontrar ahora tus pupilas vacías,desde qué ignota estrella tu luz nos llegará?
" solo es eterno siempre lo frágil" nos decías...
y a través de qué tenues y extrañas celosías
pudiera hallar tu imagen tan plena de bondad?

¿En qué mares serenos, navega tu ambrosía,
las velas de tu nave, a dónde divisar,
en qué puertos distantes te encontraré algún dia?
¡Oh, náufrago del tiempo, qué triste es la partida!
la proa aderezada sin nunca regresar...

Yo escrutaré en las noches azules las estrellas,
mas... cuán inaccesible la cima donde estás.
De qué dorada lumbre me llegan tus querellas...
Por vana, por impura, no puedo asirme a ellas;
a tientas, en las noches, queriéndote encontrar!



Milka L. Curbelo

Cartero

Todo el mundo te tiene simpatía
portador de ilusiones y esperanzas,
a veces, una carta tú me alcanzas
que es motivo de dulce algarabía.

Mañana, cuando salgas por las calles,

no demores, Cartero, que allá enfrente,
hay una madre que aguarda ansiosamente
la llegada divina de un mensaje.

Porque son a mi modo de sentir,

misiones delicadas del vivir,
el Maestro, el Poeta y el Cartero.

El que cera modela en sus panales,

el que brinda belleza en madrigales,
y el que a todos les lleva algún decir!

Milka L. Curbelo

Cantar Serrano

( para La Voz Del Pueblo con mi admiración y simpatía)

La tarde se adentra. En tinte opalino
las sierras minuanas parece encantar;
borracha de versos voy por los caminos,
con esta locura de estrellas y trinos,
la noche en un valle cercano aguardar.

Morenita buena que estás en el cerro,

(¡cuántas cosas tristes te voy a cantar!)...
llegada la noche,cruzaré el riachuelo,
y un ramo de aromos y de terciopelo,
en mis horas cruentas te habré de llevar.

Del monte de talas recogí pitangas,
!qué dulces y suaves y frescas que están!...
Mi cesta encantada lleva la fragancia
de los arrayanes que tiene la estancia,
junto con el oro del mburucuyá.

Sierras misteriosas cual de hechicería,

yo adoro el encanto de tu anochecer;
dormida me encuentren las albas un día,
ebria del embrujo de tus lejanías
lejos de la tierra que me vió nacer.

Milka L. Curbelo

enero 16, 2016

María

( A Maria del Huerto,la hija de mi soledad, retoño de amor,
 perfumando las tardes de mi otoño triste)

Me siento dos veces cobarde

       pero no vencida.
Sin fe y sin abrigo buscaba el remanso 
      de Paz a mi vida.
( Mas nunca lo hallaba ) Cabalgaba lejos de mi 
        la alegria
La Fe y la Esperanza,no se en que recodos
        perdiéronse un día.
Sola y sin amparo, como la palmera
       lo mismo me erguía !
Mas vino el invierno; barrio mi poesía
por calles muy cruentas anduve perdida.
Dios mio!  la pena que entonces sintiera 
rebasa los mares y hiende los cielos.
Me sentí cobarde frente de mi misma.
Mas vino el milagro en vez de Poesía, 
Jesús alcanzóme la dulce María,
    -manojo de estrellas-
y vivo por Ella;por esa magnolia 
que aroma mis días
y cuando la nombro Maria del Huerto
parece que se abre la tierra en abrazos
      a mi alma vacía.
Treinta primaveras sin Paz ni alegría.
Otoño que silbas con
       tu vientecillo,
no golpees muy fuerte que duerme 
          María; 
el querer mas dulce que abriga mi vida .
Tejo madrigales para mi querida,
se encarnó en la rima toda mi poesía.

Milka L. Curbelo







diciembre 03, 2013

!"Que soledad"!

Dadme el volver a ser la que era antes,
quiero la senda blanca para mí;
aquella donde estrellas palpitantes,
me ascendían a un mundo en que viví.

Qué soledad tan grande y tan pausada
la del alma que todo lo ha perdido
y por más que solloza, no ha podido
libertarse de su prisión "dorada"!

Qué anhelo de tocar a las estrellas,
por seguir del amor sus vanas huellas,
a apartarme del mundo me llevó!

Nada fui, nada soy, pude haber sido
un horizonte abierto, Señor mío, 
o una cima dorada por el sol.


Milka L. Curbelo